viernes, 27 de enero de 2017

PENÍNSULA VALDÉS



EN PENÍNSULA VALDÉS


        Admirados, asistimos a la actuación 
        de los gaviotines y de las  pardelas.
        Es un vuelo ritual. Como un vuelo sagrado.
        Cada ave danza, en   coreográfico  sortilegio
        de espuma etérea , cuando roza el agua en busca de su presa.


 Coreografía de espuma y viento
los gaviotines zambulléndose
en remolinos de nácar
con el oleaje de la bajamar.

Remolinos de vida
en explosión
respondiendo a las tropillas de arenisca
que a zancos por la dura playa
avanzan con el Padre Viento.

Sinfonía de cantos de los pájaros,
pura melodía

y  nosotros, rezando, en alabanza,
y  en silencio.
                          
Como nubes ligeras pasan, acariciando la tierra hacia el mar, las vestiduras de arena del viento, en este recodo patagónico atlántico. Un paisaje egipcio, como un mundo paralelo, aquí, en Península Valdés.

Como nubes ligeras pasan, susurrando  mantras, en vibraciones tehuelches y mapuches, en ondas que se expanden, planetarias.

La creación creándose  nos mueve a la plegaria.
En alabanza y en silencio.


                                               Cecilia Glanzmann

( De:  Juglares del silencio. Patagonia argentina, libro trilingüe, Editorial Vinciguerra)
                                           


1 comentario:

  1. Estuvimos acampando unos dias en Pardelaa y por la Peninsula. Lo que expresa el poema es vigente vivencia y lo de mi ser interior. Cecilia G.

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Cecilia