lunes, 31 de agosto de 2015

HONORIA ZELAYA DE NADER

HONORIA ZELAYA DE NADER
UN TOBOGÁN CON BUFANDA, de Cecilia Glanzmann
Presentación en Stand ESPACIO TUCUMÁN, 1/05/2015,41º Feria Inter Libro Bs.As

“Señoras y señores, muy buenas tardes:
Un muy antiguo y breve relato esquimal narra que en la noche de los tiempos vivía un pájaro que deseó con tal intensidad la luz, que la tierra se iluminó.
Este cuento, exaltación de esperanza y vida, refleja cómo la fe, los objetivos claros, más el ánimo de lucha permiten transformar la adversidad.
El pobre pájaro vivía el sinsentido de la oscuridad aislado de las cosas, de sus formas y colores.
Asilado de los otros, sin identidad, sin juegos, sin gozar de la visión de los amaneceres y de los cielos estrellados. Pero por decisión de una firme voluntad basada en los sueños, esa pesada oscuridad se transformó en un torrente de luz. Y el pájaro recuperó el mundo y le fue posible el gozo y la alegría.
Ahora bien, ¿por qué el recuerdo y el comentario del antiguo mito en la presentación del libro Un tobogán con bufanda de Cecilia Glanzmann?
Bien, a dar respuesta a tales interrogantes nos dirigimos, peo no sin antes presentar a su autora.
Cecilia Glanzmann nació en Bell Ville, provincia de Córdoba. Hacia septiembre de 1972 nuestra autora se radica junto a su esposo y sus dos primeros hijos en la ciudad de Trelew, Chubut, donde  posteriormente nacerían tres niños más. Graduada en Letras, su pasión por la cultura la llevó a cumplir diversas funciones ligadas de manera incondicional a la literatura en tierra patagónica. Integró e integra diversas instituciones lingüísticas de proyección nacional e internacional, entre ellas el Instituto Literario y Cultural Hispánico de California, la Fundación Argentina para la Poesía, la Sociedad Argentina de Escritores, el Instituto de Investigaciones Lingüísticas y Literarias de la Universidad Nacional de la Patagonia. Es asimismo Cofundadora del Grupo Literario Encuentro, al que presidió por quince años, fue presidente de la Sociedad Argentina de Escritores Filial Chubut, Delegada del Fondo Nacional de las Artes y se desempeñó como Directora de Cultura de Trelew. Estudiosa infatigable, ha participado como expositora y conferencista  en congresos nacionales e internacionales y ha recibido importantes distinciones desde su tarea creadora.  Y su vida ha sido una entrega a la docencia en casi todos los niveles.
Pero esta tarde interesa señalar de manera central que Cecilia Glanzmann es además miembro de la C.D. de la Academia Argentina de Literatura Infantil y Juvenil. No en vano en este acto, se encuentran presentes prestigiosos y queridos colegas de la mencionada institución.
Inscribe numerosas publicaciones, entre ellas: Amor de Remolacha, Hilanderos de la luz, Ritual de las cigarras, Liberándonos. Y esta noche nos trae Un tobogán con bufanda, obra que sin lugar a dudas marca un aporte importante en la historia del género en nuestro país y hacia ella vamos.
No si antes retomar la respuesta prometida inicialmente en torno a la relación existente entre el mito esquimal y la obra que nos ocupa, para señalar de manera contundente que el nexo es axial.


 En Un tobogán con bufanda de Cecilia Glanzmann no sólo se da el triunfo de la luz sobre la oscuridad, sino que nuestra autora logra iluminar desde la literatura el mundo mágico de las palabras dirigidas a la infancia.
Tres poderosos ejes giran en torno a la obra que nos honra presentar: a)El tema del vuelo. b) El  interjuego de la realidad y la fantasía y  c) La inclusión de las redes digitales entramada con los juegos tradicionales.  
a) Respecto al vuelo nos apoyamos en lo señalado por la académica Bertha Bilbao Richter cuando expresa que Cecilia Glanzmann intenta en esta obra “hacer de los niños incipientes aprendices de pájaros capaces de posarse en el árbol de la vida para embellecer el mundo”.
b) En cuanto al interjuego de la realidad y la fantasía hacemos nuestros los conceptos vertidos por la Profesora Licenciada Cristina Pizarro cuando expresa que los mencionados factores se plasman en el amor y el respeto por la naturaleza, en el contacto cercano con el suelo, con el río, con las plantas, con los pájaros y otros animales.
c) Y ubicados en la inclusión de los temas de las redes digitales entre abuelos y nietos, el relato emana un cálido encuentro generacional que de modo alguno deja de lado los juegos tradicionales, tal es el caso del cuento titulado El barrilete:
                            (Cito)
Hace poco creo que me salí del archivo de la compu.
                    Parece que alguien muy curioso hizo clic en ver y otro clic en Zoom y yo,                                         que me creía algo así como una estampilla colorida, aunque pudiese mostrarme haciendo piruetas en el aire y dando explicaciones de cómo soy y de cómo estoy hecho patatín, pirulán, lan, lan…, me sentí de pronto, un barrilete. Síii…, ¡un barrilete de verdad! De verdad verdadera, en serio te lo digo. No vivo ahora sólo adentro de la compu.
Conmueven el lirismo y la fantasía de Historia de la lluvia en una tarde de primavera,  la calidez de Un tobogán con bufanda, la magia de Un huevo azul, la riqueza histórica y maravillosa que late en El carro de bueyes de Cholila, el encanto, la desbordante imaginación, el sabor de la gota Panzuna y de la gota Flaquina, quienes quedaron haciendo equilibrio hasta volverse equilibristas. Una página impregnada del sabor de la cocina familiar.  No menos enternecedor y convocante es el cuento Villa Alegría en el que un niño por nacer ilumina mundos.
                             (Cito)
        Vivo en una panza muy cómoda y líquida y desde hace seis meses me llaman Ulises. También Uli. Paseo por la Ciudad de los Sueños y no sé bien si mamá y papá se dan cuenta de todo lo que conozco de este lugar.

Indudablemente, en Un tobogán con bufanda  hay niños adentro buscando y encontrando el lugarcito que anhelan. Hay niños y jóvenes construyendo y desconstruyendo, en función de la magia de palabras que convocan y encandilan. Hay historias que hacen enmudecer, pero nunca dejan indiferentes a sus lectores, porque late en esta obra un mundo proyectado por una auténtica creadora desde la magia de palabras que convocan y encandilan. Sí, se trata de un mundo especial. De la creación de una intimidad. De aquello que se está gestando en el alma infantil como respuesta a lo circundante.
No es ningún secreto que el niño necesita de sueños y juegos. En latín diríamos de  illudo, de in más ludo. ¿Acaso no juega desde la lozanía de su ser al juego del verbo creador que lo hace crecer y que le permite madurar y ser él mismo, palabra?
Indudablemente esto es así, el niño necesita jugar con historias, sondear territorios infinitos y legendarios, prefigurar la grandeza del espíritu en la virtud, conjugar creación y magia, deseos y juegos.
No en vano cuentos y trascendencia  son los binomios de la varita mágica que posee la gracia de convertir el universo en un paisaje por cosas deseables, que son y han de ser realidad para que el niño de hoy habite mañana en un mundo humano como el que enmarcan historias que nos cuenta Cecilia en Un tobogán con bufanda.
Un tobogán con bufanda no sólo invita a recrear mundos, sino que valora los sueños infantiles, sus relatos, sus palabras, y en consecuencia supo recogerlos y hacerlos libro. Un libro que nos recuerda aquel pasaje a través del espejo en el que la heroína se encuentra de frente con un fabuloso unicornio y lejos de aterrorizarse, con una sonrisa de asombro exclama:
-¿Sabes una cosa? Yo creía que los unicornios eran unos monstruos fabulosos. ¿Nunca había visto uno de verdad!
-Bueno, pues ahora que los dos nos hemos visto, yo creeré en ti, si tú crees en mí, ¿trato hecho?

Mención especial merecen los dibujos realizados por María Valeria Glanzmann, hija de nuestra autora, a través de una poderosa técnica y sensibilidad creativa.
En suma: Un tobogán con bufanda entrama relatos fantásticos en los que junto a la lógica convive la más libre, desbordante, extraña y anticonformista fantasía que permite encontrarnos con mundos al revés, con juegos de lenguaje, con absurdos, con paradojas, con adivinanzas, en las que las palabras llevan en la médula el compromiso de vivir.
Mi querida Cecilia, mis queridos colegas y amigos, prestigiosos invitados especiales, les reitero el dolor que me produce no poder estar físicamente presente en este acto, pero tengan la seguridad de mi presencia espiritual.
A todos mi cordial abrazo, a María Teresa D´ Andrea mi gratitud y a la autora mi reconocimiento infinito por este honroso espacio.
                                 Honoria Zelaya de Nader
                                  (San Miguel de Tucumán)


N: Un tobogán con bufanda se presentó en ESPACIO TUCUMÀN, en la 41 Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, el 1 de mayo de 2015. Invitaron y organizaron Espacio Tucumán de la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Provincia de Tucumán y la Academia Argentina de Literatura Infantil y Juvenil (auspiciante de  este libro, editado con cuidado y exquisita belleza por Editorial Vinciguerra)
La Dra. HONORIA ZELAYA DE NADER , académica de número de la AALI y J, en virtud de un accidente de quebradura y de cirugía, no pudo asistir al acto, pero envió a la Coordinadora Cultural María Teresa D´Andrea quien tuvo a su cargo leer y transmitir a todos la presentación preparada por la Dra. Nader.
La Presidente de la AALI y J, ZULMA PRINA, tuvo  a su cargo las palabras de presentación inicial, luego fue el comentario de la Dra. Nader, por Ma. Teresa D´Andrea, y finalmente tuvo la palabra Cecilia Glanzmann, en nombre de su hija, ilustradora de la obra, Marìa Valeria, y de ella misma, sobre esta obra. CRISTINA PIZARRO, autora de unos de los textos a docentes, padres alumnos, en el libro, y fundadora , expresidente de la AALI yJ, y académica de número,  estuvo presente acompañando este acto, como otros miembros de la misma.
Gratitud a  todos!  Y a la familia , amigos y colegas que asistieron.
                              Cecilia Glanzmann


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por dejar tu comentario. En breve lo contestaré.
Cecilia